SECRETARIADO
DIOCESANO
PASTORAL
DE LA SALUD
c/
López Botas, 8
35001 Las Palmas de G.C.
Queridos
amigos:
Queremos desearles un buen curso,
tanto a nivel pastoral como en la vida personal, familiar y comunitaria de cada uno. Las vacaciones se nos han quedado atrás y nos
disponemos a recorrer este nuevo trecho del camino con ánimo e ilusión
renovados. Desde la Pastoral de la Salud , la clave de este
caminar está en la mirada y el corazón,
y ahí pondremos el acento, de forma especial, en este curso. Sólo desde ahí
podemos vivir con Salud y llevar Salud.
Para este año el Pontificio Consejo nos propone el
tema “Sapientia cordis. «Yo era ojos para
el ciego, era pies para el cojo» (Job 29, 15) como tema central para guiar la
reflexión y la pastoral en el mundo del
sufrimiento.
En
este tiempo nuestro, en el que a menudo sólo cuenta lo que “reluce” y lo
efímero, la sabiduría del corazón consiste en la recuperación de la mirada hacia la persona doliente con actitud contemplativa. Una mirada como la de
Jesús que nunca pasaba de largo ante quien estaba sufriendo.
En
este momento de la Iglesia
en que el Papa Francisco en Evangelii Gaudium nos invita a volver a Jesús,
necesitamos recuperar esa llamada a hacer nosotros lo mismo y con las mismas
actitudes. Tenemos que abrir nuestros
ojos para descubrir donde están hoy los enfermos, cómo están siendo
acompañados y visibilizados en nuestra sociedad e Iglesia, y transformar el corazón de las mismas
para que los pongan al centro de sus preocupaciones y atenciones.
Viviremos
este 2015, también, como el Año de la
Vida religiosa. En él deseamos agradecer la inmensa labor que
tantos religiosos/as han hecho con los enfermos. Y animar y fortalecer la
ilusión de nuestras comunidades religiosas para que sigan siendo motor de atención
y respuesta esperanzada a tantos retos que se nos plantean cada día en el mundo
de la salud (1)
Que la acción de nuestras manos, las decisiones
personales, las de nuestros equipos y comunidades sean pensadas y valoradas
desde una mirada contemplativa y procedan de la bondad del corazón.
Adjuntamos la programación de este curso. Una vez más, lanzamos la llamada a todos los
que están implicados en el mundo del enfermo a coordinarse con este
Secretariado y a formarse para la misión que realizan.
Un abrazo a todos, que nos vivamos unidos y
trabajando con un mismo sentir, embarcados en un mismo proyecto, animados por
un mismo Espíritu.
(1) Orientaciones del
Departamento Nacional de Pastoral de la Salud
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